«El psicólogo pide al sujeto que diga qué podrían ser las imágenes que ve en las manchas, como cuando uno identifica cosas en las nubes o en las brasas. A partir de sus respuestas, el especialista puede establecer o contrastar hipótesis acerca del funcionamiento del sujeto.»
«Hipótesis acerca del funcionamiento del sujeto»
¿Qué ven acá?
Waffles para todos empezó en Septiembre del año pasado, el mismo día que Bélgica inició su camino a Brasil, contra Gales. Meses antes, siendo un devoto de la EPL, el potencial belga en equipos fundamentales me deslumbraba.
La capacidad técnica de cada uno de sus jugadores, las posiciones complementarias en las que se desempeñan, la suma de potenciales futbolísticos. Bélgica, sin dudas, mostraba un talento enorme.
La duda pasaba por la experiencia. La frase «Los pibes ganan partidos, los hombres campeonatos» probó ser cierta una y otra vez. Pero, en este caso, la edad no era el sinónimo directo de madurez. No, la experiencia requerida por Bélgica era aquella que solo se obtiene jugando, probando y perdiendo.
Y Bélgica esta superando las pruebas.
Ayer, los Waffles ingresaron al estadio sabiendo que Croacia perdía. Fue la primera oportunidad de ser punteros únicos en el Grupo A. Olvidar de una vez el repechaje, temido, donde un sueño puede derrumbarse por una mala campaña de Inglaterra, Francia o España.
Y estos chicos demostraron su hombría.
De Bruyne es un crack sin edad. Su futuro, cercano a BVB, es esperanzador para el fútbol mundial. Courtois hizo más de lo que nos tiene acostumbrados, un nivel superlativo. Witsel se adueña de las tareas defensivas del mediocampo. Mirallas fue puro vertigo cuando entró en contacto con la pelota.
¿Y Fellaini? Demostró, exactamente, lo que Wilmots quiere de el. Sacrificio y responsabilidad. Ponerse la mochila belga al hombro. El capitán sin cinta empujó al equipo en el peor momento del segundo tiempo y encontró el segundo gol, el aire.
waffles para todos 